blogger,  Turquía,  Viajes

Con el Sol a cuestas. Día 4: Chimeneas bajo el sol

DIA
4 CAPPADOCIA

 

Me desperté con el cuerpo
dolorido y como si no hubiera dormido nada, los años pesan y no es lo mismo
viajar con 18 que con unos cuantos más. 
Ya brillaba la luz afuera y no se veía ninguna población, tan solo un
paisaje amarillento salpicado por algunos lagos. Aprovechando la WiFi del
autobús y echando un ojo al reloj vi que aún quedaba algo más de una hora para llegar al
destino, así que intenté echarme un rato más. Tras unos minutos, el autobús
hizo su primera parada de la mañana y ya no volví a dormirme. Aún tardaríamos
en llegar a Nevsehir algo más de esa hora calculada. Se veía una ciudad al
fondo, pero el autobús paró a unos cientos de metros, a las afueras, en lo que
parecía ser la estación de autobús de Nevsehir. Ahí rápidamente nos echaron del
autobús a todos los que fuéramos a algún pueblo de la Cappadocia. En nuestro
caso Urgup, que era donde habíamos reservado el coche de alquiler o eso
creíamos. 

 

Y digo creíamos porque el alquiler lo solicitamos a través de una
franquicia de búsqueda de alquileres baratos y aunque pusimos nevsehir,
finalmente aparecía Urgup-Nevsehir en la reserva. Tras intentarlo aclarar, no
pudimos encontrar más confirmación que la del papelito, ya que al meter la
dirección en internet no dejaba claro si se trataba de Urgup o no, la calle no
existía en google maps. Nos montamos en un mini bus que hizo varias paradas
antes de llegar a nuestro destino. Por el camino ya pudimos avistar las
primeras típicas formaciones-chimenea (comúnmente llamadas penes) de esta
región.Allá por el año 200 antes de Cristo el volcán Erciyes entró en erupción
y los ríos de lava y cenizas ocuparon toda esta región. Con el tiempo la lava
cristalizó y por la erosión de la lluvia y el viento solo las partes más duras
de la formada roca quedaron en pie. Debido a su fragilidad, chimeneas, pirulís,
falos y penes fueron escarbados por los lugareños y utilizados como casas,
iglesias y monasterios.

 

El responsable – «Erciyes From Aktepe Goreme» by Bjørn Christian Tørrissen – Own work by uploader, http://bjornfree.com/galleries.html. Licensed under CC BY-SA 3.0 via Wikimedia Commons.

Dudosos sobre la localización de
la oficina de alquiler y temiendo tener que volver a Nevsehir finalmente la
encontramos con la ayuda de un local, al menos estábamos en la localización
correcta. El proceso de alquiler llevó su tiempo, para mí que nos alquilaron el
coche de su primo y habían ido a buscarlo en ese mismo momento. Pero no nos
importó, no íbamos a recorrer ningún rally y las distancias tampoco iban a ser
muy grandes; el coche era antiguo y estaba sucio, pero funcionaba y ya no
tendríamos que preocuparnos por roces y/o golpes. Tras desayunar en una
cafetería pusimos rumbo a Goreme, donde decidimos que íbamos a montar el campamento
base. Goreme es el pueblo más conocido de la Cappadocia, está lleno de
hostales, hoteles y pensiones escarbados en las rocas, todos los buses pasan
por él y está en una localización cercana a los lugares de interés de esta
zona. El más conocido y visitado es el open air museum (museo al aire libre)
que se encuentra a las afueras del pueblo. No teníamos alojamiento reservado,
pero habíamos echado un ojo a un par de sitios el día anterior por internet y
habíamos contactado con uno de ellos. Para encontrarlo preguntamos a los
lugareños, que muy amablemente nos indicaron pero nos avisaron de que los
dueños estaban de boda y que seguramente estuviera cerrado. Encontramos el
albergue y salimos a preguntar, la solana que estaba cayendo era importante y
lo que necesitábamos era una cama a la sombra. Con esa temperatura y sin haber
dormido bien no podíamos salir a visitar nada. El dueño del albergue nos
recibió con una cara de resacoso brutal, nos contó que era su boda y que
estaban de celebraciones, que no podía atender a los huéspedes como era debido
y que dejaba a nuestra elección el quedarnos o no. Pese a que las habitaciones
aún no estaban preparadas, ya que los inquilinos también asistieron a la
celebracióny no les quiso levantar, decidimos plantar el huevo allí. Tenían una
terraza con sombra muy agradable y nos invitaron a volver a desayunar.
Llevábamos pensando días atrás en realizar el famoso viaje en globo al
amanecer, así que se lo comentamos. El muchacho nos dijo que podía intentar
encontrarnos un hueco para la madrugada con una de las compañías que les hacía
descuento. Finalmente decidimos dejarnos el pastofen (130€ por barba) y contratar el viaje, al día
siguiente veríamos si había merecido o no la experiencia. Mucha gente viene con
el viaje ya reservado, pero por lo que vimos yo recomendaría reservarlo a
través del alojamiento ya que los precios son bastante más baratos y hay
cientos de compañías. Una vez finalizados los trámites monetarios y con las
habitaciones ya disponibles, tocaba la siesta de rigor.

 

Casas-cueva en Goreme

Sonó el despertador y
activamos el modo turismo de nuevo. En cuanto salimos a la calle vimos que Lorenzo
no daba tregua y que el calor era bastante asfixiante, aun así no nos quedaba
otra que aprovechar el poco tiempo en visitar la zona. Nuestra primera parada
fue el Goreme Open Air Museum. Pese a que se puede llegar caminando (unos
15min), decidimos hacer uso del coche y ahorrarnos esos minutillos infernales.
Hay un parking de pago junto a la entrada, pero también hay lugares para
aparcar sin tener que pagar nada un poco más alejados. Tras pagar
religiosamente la entrada (25 TL) nos juntamos a la horda de turistas que
poblaba el complejo, intentando seguir un recorrido con menos gente. El museo
es de los lugares más visitados de la Cappadocia por su situación y cantidad de
frescos e iglesias. El estado de conservación de los frescos bizantinos deja
mucho que desear. Se nota la acción de la erosión, pero supongo que también el
abandono que sufrieron tras la expulsión de sus moradores y constructores, los
griegos bizantinos. La visita merece mucho la pena y cuando tienes la suerte de
entrar solo en una de las iglesias aprecias mucho más el lugar. En lo alto de
la colina se encuentra la iglesia oscura (KaranlıkKilise) en la que hay que
pagar 12 TL extra (si mal no recuerdo) por entrar. En ella se encuentra el
fresco mejor conservado y el que merezca o no pagar la entrada pues dependerá
de lo interesado que estés en este tipo de arte.

 

Goreme Open Air Museum

Casas-cueva
Fresco bizantino en el interior
Tomando el sol
Vista del museo
Nuestra cueva
Subiendo a una iglesia
Interior
Iglesia oscura
Otro fresco bizantino
Posando

Bien torrados y con el estómago vacío volvimos al coche rumbo a
Uchisar donde buscaríamos un lugar para comer.
Por el camino nos encontramos con un mirador
al denominado GuvercinlikVadisi o valle de las palomas y no dudamos en bajar a echar
un par de fotos. De paso nos acercamos a un restaurante pero no nos apañaron
los precios. Aparcamos en el centro del pueblo cerca del precioso castillo que
lo corona. Dando unas vueltas encontramos un sitio de kebap con terraza-ático
exterior y sombra, nuestro lugar para comer. Desde el tejado había buenas
vistas del castillo. No quisimos ir a visitar el castillo no por falta ganas
sino por falta de tiempo, al atardecer queríamos llegar al valle Rosa así que
apuramos la comida y nos volvimos a meter en el coche.

Los palomos y su valle
Uchisar y su castillo al fondo
En la terracica
Castillo Uchisar

Tuvimos que pagar una
pequeña entrada por persona para pasar al valle rosa a ver la puesta de sol, aún no sé muy bien por qué. Aparcado el coche
en lo alto de la montaña nos acercamos a la ladera donde la gente estaba
sentada en varios rústicos sofás y sillas desde los que ver la puesta de sol.
Dejé al par de tres allí sentadas de cháchara y yo me adentré en el valle. El
lugar merece mucho la pena y la puesta de sol es preciosa, los colores
anaranjados del sol van pintando las chimeneas rosadas y el juego de luces y
sombras es un regalo para los ojos. Colina arriba, colina abajo busqué un
camino de vuelta alternativo antes de que se cerrara la noche y la verdad que
fue toda una experiencia el pasear entre aquellas formaciones y hasta tener que
bajar unas precarias escaleras por una de ellas. Por el camino me encontré con
una casita entre las chimeneas, con su huerto y su bar. Gracias a la ayuda de
un pequeñajo encontré un camino de subida al reencuentro de mis compañeras de
viaje. Una vez arriba nos hicimos más fotos, pillamos algo de beber y una
mazorca de maíz. 

Rose Valley
Esperando en el sofá
Caminando por el valle
El sol comienza a caer
Luces y sombras
Adiós Lorenzo
 
Se acabó el sol
Caminando entre chimeneas
Foto finish

Estábamos de vuelta en Goreme, dejamos el
coche en el albergue y salimos a cenar y dar un paseo por el pueblo. Estuvimos
dudando en si acercarnos a la boda del dueño ya que este nos invitó. No
sabíamos el lugar, pero habíamos visto que en el restaurante de al lado del
Open Air Museum estaban montando mesas y sillas con lo que no podía ser otra
cosa. Al final el hecho de tener que madrugar a las 4 de la mañana para ir al
globo pesó más y nos acostamos sobrios y no excesivamente tarde.

 

Siguiente Capítulo

 

Índice de capítulos

Día 0. Belfast-Dublín-Copenhague

Día 1. Copenhague-Estambul

Día 2. Estambul

Día 3. Estambul. Bus nocturno a Nevsehir (Cappadocia)

Día 4. Cappadocia

Día 5. Cappadocia. Bus nocturno a Pamukkale

Día 6. Pamukkale-Kusadasi

Día 7. Kusadasi-Samos-Ikaria

Día 8. Ikaria-Mykonos

Día 9. Mykonos-Santorini

Día 10. Santorini

Día 11. Santorini

Día 12. Santorini. Ferry nocturno a Atenas

Día 13. Atenas

Día14. Atenas. Bus a Kalambaka (Meteora)

Día15. Meteora. Bus a Tesalónica. Vuelo a Gerona.

 

 

Si tienes pensado viajar a Turquía o Grecia no te olvides de contratar
un seguro de viaje. Si quieres conseguir un 5%
de descuento
por ser lector/a del blog, puedes usar los seguros Mondo, que son los que yo utilizo, pinchando en el siguiente enlace.

 

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *